Las pinzas metálicas de 25 mm tienen un diseño de dos brazos articulados que se cierran mediante una acción de resorte o una palanca de cierre. Los extremos de los brazos están equipados con mandíbulas o puntas estriadas que proporcionan un agarre firme y seguro.
Estas pinzas son muy versátiles y se utilizan en una variedad de aplicaciones, como trabajos de laboratorio, electrónica, mecánica, ensamblaje de pequeñas piezas y actividades de bricolaje. Son especialmente útiles cuando se requiere una sujeción precisa y firme, como en la manipulación de componentes delicados o la realización de tareas que involucran cables, alambres o pequeños objetos.
La longitud de 25 mm se refiere a la distancia entre las puntas de las mandíbulas cuando las pinzas están completamente cerradas. Esta medida permite un agarre preciso en objetos de tamaño reducido.
En resumen, son herramientas de sujeción duraderas y versátiles que ofrecen un agarre firme y preciso en una amplia gama de aplicaciones. Son indispensables en entornos de trabajo donde se requiere precisión y manipulación segura de objetos pequeños.